13 de julio: Día Internacional del Trastorno por Déficit de Atención e Hiperactividad

Jul 11, 2025

Esta conmemoración es una oportunidad para educar a la población sobre este trastorno y combatir los estigmas asociados. Las personas con Trastorno por Déficit de Atención e Hiperactividad (TDAH) a menudo enfrentan malentendidos y juicios negativos debido a sus síntomas, por lo que es fundamental, crear un entorno más comprensivo y de apoyo.

El TDAH es una condición neurobiológica que afecta a niños, adolescentes y adultos, se caracteriza por ser un trastorno que predomina la inatención, hiperactividad e impulsividad, del cual se pueden manifestar de distintas maneras y en distintos grados de severidad, afecta la vida diaria y las habilidades funcionales de quienes lo padecen. Es resultado de una combinación de factores genéticos, ambientales y neurológicos en momentos claves del desarrollo.

Que no pongan atención en clases o reuniones, no quedarse quieto, no alcanzar a terminar actividades producto de la falta de organización, son las señales más comunes, donde pueden sentirse incomprendidos y frustrados. Muchas veces destacan por su creatividad y la generación de ideas novedosas, son espontáneos, tienen soluciones originales, curiosidad innata y son personas sociales.

Síntomas comunes del TDAH:

  • Inatención: Desatención, descuidos que generan errores, dificultad para seguir instrucciones y finalizar tareas, olvidadizos, evitan el esfuerzo mental y dificultad para mostrar interés cuando se le habla directamente.

  • Hiperactividad: Inquietos, dificultad para permanecer sentados, corren o trepan en situaciones inapropiadas y hablan excesivamente.
  • Impulsividad: Responden rápidamente sin pensar, interrumpen o interfieren en conversaciones o juegos y tienen dificultad para esperar su turno.

El diagnóstico debe ser realizado por un profesional de la salud a través de una evaluación exhaustiva que incluya la observación de los síntomas, historia clínica y la entrega de información de padres y/o profesores en el caso de los niños.

Existen los siguientes tipos de TDAH:

  • Déficit de atención con hiperactividad (combinado).
  • Déficit de atención con hiperactividad, con predominio de inatención.
  • Déficit de atención e hiperactividad, con predominio de impulsividad-hiperactividad.

Tratamiento

El tratamiento y el apoyo, requiere un manejo multidisciplinario con pilares a cargo de neurología, psicología, psicopedagogía y terapia ocupacional.

También existen fármacos que pueden ayudar a mejorar la atención y reducir la hiperactividad e impulsividad. En relación a la terapia, ésta sería de tipo “conductual”, con técnicas para manejar el autocontrol, tolerancia a la frustración, resolución de problemas, atención sostenida, desarrollar habilidades organizativas y de manejo del tiempo. Además, para los más jóvenes, existe apoyo educativo con adaptaciones y estrategias en el entorno escolar para ayudar a los estudiantes a tener éxito académico.

Por último, se realizan programas psicoeducativos a los padres para manejar con respeto y de manera correcta los síntomas del TDAH en el hogar, implementando normas y mejorando la autoestima.

Si este trastorno no es tratado a tiempo, puede complicarse y ser más difícil de resolver, pudiendo producir daños en la personalidad del niño, adolescentes y adulto; baja autoestima, depresión, ansiedad, fracaso escolar, inadaptación, etc.

Es importante mencionar, que el buen pronóstico se relaciona con una dinámica familiar protectora y estable, hábitos saludables y consistentes, figuras significativas ejemplificadoras (predicar y practicar) y tratamiento multidisciplinario oportuno.

Medicina Preventiva Programa “Salud Mental”
JEPLANGES

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