Esta enfermedad, también conocida como fiebre escarlata, es una enfermedad de origen bacteriana, causada por el Streptococcus beta hemolítico del grupo A.
Se caracteriza por un rash escarlatiniforme (sarpullido) rojo en casi la totalidad del cuerpo, con aspecto de piel de gallina. Generalmente comienza en el cuello y se expande por el tronco. Tiende a respetar el triángulo que se forma entre la nariz y el mentón, destacando las mejillas enrojecidas.
Los principales síntomas son:
- Sarpullido rojo
- Enrojecimiento de la lengua (como una frutilla)
- Amígdalas enrojecidas y con placas
- Dolor de garganta
- Dificultad para tragar
- Dolor de cabeza
- Rostro enrojecido
- Fiebre
La principal forma de transmisión es el contacto cercano con personas infectadas, ya que se transmite a través de las secreciones respiratorias que se diseminan al hablar, toser o estornudar.
Si la enfermedad se diagnostica y se trata a tiempo, evoluciona favorablemente y sin dejar secuelas. De lo contrario, podría provocar daño en otros órganos como las válvulas cardíacas, riñones, provocar abscesos periamigdalinos, etc.
A los pacientes con escarlatina se les administra antibióticos. La enfermedad deja de ser contagiosa después de dos días de iniciado el tratamiento.
Por ello, es fundamental consultar a tiempo, con el fin de recibir el tratamiento médico de manera oportuna.
Programa Preventivo Vig. Epid. Enfermedades Transmisibles
JEPLANGES